Año Nuevo, ¿Vida Nueva?

Un poco de astronomía.
Los planetas realizan órbitas elípticas alrededor del Sol. Cada planeta dependiendo de su cercanía o lejanía gira más o menos rápido, cuanto más cerca del Sol más velocidad y más rapidez en dar la vuelta y por el contrario cuanto más lejos menos velocidad y más tiempo tardará en girar alrededor del Sol. La Tierra que es lo que nos interesa tarda en girar alrededor del Astro Rey 365 días y 6 horas, para ser un poco tiquismiquis - 365 días 5 horas 48 minutos y 45,10 segundos - naturalmente el calculo se hace teniendo en cuenta que la Tierra gira sobre si misma y que cada día son 24 horas. Todos esto quiere decir que cada cuatro años la Tierra añade un día más lo que sería un gran desfase en el calendario, para corregir todo esto se <<inventó>> el año bisiesto.

Historia de los calendarios.
Este era un hecho ya conocido en el Imperio Romano, otra vez los de SPQR, pero desconocían como solucionarlo. El calendario romano era un autentico choteo de hecho el año 46 a. C. duró la friolera de 445 días para compensar la descompensación. El que manejaba el cotarro por aquél entonces un tal Julio Cesar, el de la capa roja, encontró la solución cuando viajó a Egipto. A parte de beneficiarse a Cleopatra, el muy lascivo, encontró un calendario que podía darle la solución, por lo visto no eran tan bestias estos romanos ya que debió de visitar la Biblioteca de Alejandría antes de quemarla. El encargo recayó sobre un tal Sosígenes de Alejandría que presentó el trabajo posteriormente a Julio Cesar. Se bautizó con el nombre de Calendario Juliano, se trataba de un calendario que añadía un día cada cuatro años puros y duros manteniendo los meses con los nombres romanos.

Pero claro, aquí ocurría un error, cada cuatro años bisiestos se acumulaba un día, si seguimos con la suma cada 1.460 años se acumulaba un año, ¿no queríais una taza o un día? Pues toma un año adicional, quiere esto decir que si nos manejamos con el calendario Juliano entre el año 556 y el 2.016 teóricamente han pasado 1.460 años pero con la suma de los días bisiestos hay que añadir ese año de más luego teóricamente son 1.461 años. Por suerte esto no llegó a ocurrir, durante el papado del Papa Gregorio XIII se percataron del error realizando la corrección correspondiente y aplicando la definición de año bisiesto.

Año bisiesto.
El año bisiesto es el año en donde se añade un día al año en curso para compensar ese desfase, ese día se añade al final del mes de Febrero que pasa a tener 29. Los años donde se produce esto son los divisibles por 4 a excepción de los que acaban con doble cero <<00>> y no son divisibles por 400, ejemplo 2.100 no es año bisiesto no es divisible por 400, 2.400 sí por ser divisible por 400. Todo esto se hace para realizar las compensaciones correspondientes por el tiempo que tarda la Tierra en girar alrededor del Sol.

Como simple anécdota decir que para compensar el desfase ya acumulado por aquel entonces los días que fueron del 4 de octubre al 15 de octubre del año 1.582 simplemente no existieron, se saltó de la primera fecha a la segunda ya que existía un desfase de diez días y pasamos a lo que se define como el Calendario Gregoriano. Para calcular fechas de antes del 4 de octubre de 1.582 hay que tener en cuenta este desfase, en fin, un verdadero quebradero de cabeza. El desfase que se produce ahora es de menos de medio minuto por año. El calendario que usamos en Occidente es el calendario Gregoriano, otros países de la órbita Occidental siguen usando el calendario Juliano, creo que esto último es más por tocar la moral que por otras cosas.

Por cierto el Año Nuevo que celebramos es el Año Nuevo Occidental, otras culturas lo celebran en otras fechas del calendario, no me voy a alargar en ello sería demasiado tedioso.

CELEBRACIONES.
Propósitos para el año entrante.


Cuando se llega a esta fecha del 31 de Diciembre, noche vieja, se producen muchas celebraciones en todo el planeta. Todos nos felicitamos cuando volvemos a dar la vuelta al Sol, todo de muy buen rollito claro. El pistoletazo de salida se da desde Nueva Zelanda ya que es el primer país en entrar en el nuevo año, todo son grandes fuegos artificiales y fiestas, supongo que esto se celebra por seguir con vida en este mundo y también por celebrar algo ¡que carajo!

Curiosamente se realiza como una especie de catarsis que consiste en ponernos una especie de diario con todo aquello que queremos hacer durante el año, adelgazar, escuchar música, estudiar, aquella llamada pendiente, etc ... Luego todo vuelve a la normalidad y seguimos con nuestras vidas haciendo lo de siempre por eso escribo lo de ¿vida nueva? ya que a pesar de las buenas voluntades que tengas la inercia que tienes en la vida te lleva por donde te lleva.

También ocurre como en Navidad, durante la noche vieja series que inciden en el cambio de año con cierto trasfondo místico, programas de televisión bastante repetitivos en su contenido año tras año consistente en musicales con cantantes que ni están ni se los espera y que además lo repiten el día de Año Nuevo, es una conjura gubernamental lo sé. No olvidemos los saltos de esquí del día de Año Nuevo o el concierto de música clásica de la cadena pública de este país, son los clásicos que hay en estas fechas.

Por mi parte la familia lo quiere celebrar y yo estoy acompañándolos ya que me echarían en falta. Aprovechamos para estar juntos, buena cena y buena compañía. Las risas vienen en las campanadas de fin de año al comer las doce uvas, yo siempre hago trampa y me las como un poco antes alguno se atraganta pero no es nada grave. Se abre una botella de cava catalán o dos y se chocan las copas felicitándonos la entrada del Nuevo Año. Para mi no es un día demasiado especial, personalmente no lo celebraría ya que tan solo es un día más que se añade al calendario pero bueno ya puestos a nadie le amarga un dulce. Por cierto, debido a la proliferación de cadenas de televisión desde hace unos años tenemos cierto conflicto para decidir donde vemos las citadas campanadas, creo que esto ocurre en casi todas las casas, naturalmente la sangre no llega al río. Después de la celebración en familia cada uno sale con quien sea y aprovecha la noche ya que el día siguiente es día de Año Nuevo, yo nunca salgo los precios que ponen cuando pides una copa de champán siempre los he considerado un abuso, aún así, la vida sigue.

Vosotros ¿cómo celebráis el Año Nuevo? Escríbeme unas líneas y ...
¡¡FELIZ AÑO NUEVO!!

Lo más visto del mes